Sus miembros son: Ana Lozano, Cruz Gabaldón, Elena Denia, Eva G. Guerrero, María Tordera, Marisa Alemany y Miriam Jiménez Iriarte

-
Ácronos de Acero y Sangre
-
-
-
-
-
El Abismo Mecánico y Otros Relatos sobre la Inteligencia Artificial
12,35€ -
-
-
-
-
-
-
EL MAUSOLEO DE LAS COFRADITAS - CRUZ GABALDON
-
Gran Shakti de Kil - Marisa Alemany
-
LA MANO DE DIOS - Miriam Iriarte
-
SENTIMIENTOS - Ana Lozano Cantó
-
LA VOZ DE BRUMA - Elena Denia
-
Y TAMBIÉN SOY LA MUERTE - Juan Miguel Aguilera
-
LA SOMBRA DE DOCE LUNAS - Eva Guerrero
-
VOLVER A VRINDABAN - María Tordera
-
2016-04-21 Firma de Libros-Alfafar
-
2016-11-08_Generacion Bibliocafe
-
20170623_Creando Proyecto Artemisa
-
Taller SIFI
-
LA MANO DE DIOS2014
DH – 8. Un poquito de amor
Incluso en una ocasión nos dimos un abrazo al coincidir en una broma, pero no apretó ni un poquito para acercarse más. Me fascinaban sus ojos rasgados con el iris del color de la miel al de la aceituna. Si yo hubiera sido una yorkshire me hubiera sentado en su regazo con la lengua fuera de pura satisfacción.
DH – 8. Un poquito de amor
Incluso en una ocasión nos dimos un abrazo al coincidir en una broma, pero no apretó ni un poquito para acercarse más. Me fascinaban sus ojos rasgados con el iris del color de la miel al de la aceituna. Si yo hubiera sido una yorkshire me hubiera sentado en su regazo con la lengua fuera de pura satisfacción.
Read moreDH – 7. Pequeñas felicidades
Conforme profundicé escuchando su voz fui consciente de que mi atracción primigenia por Harón no había sido simplemente física, pues ahí tenía un clon del ‘dios del amor’ —el hermano fotógrafo— y sin embargo, este esposo bienavenido no levantaba mi libido de la forma que sí lo hacía mi oculista.
Read moreDH – 6. Amores platónicos
Él mismo abrió la puerta para entrar en la consulta y no tuve que esperar. Ante mí un espécimen de homo sapiens varón que me sacaba la cabeza, con una espalda en forma de triángulo isósceles y sendas efes marcando las clavículas de hombro a hombro, empuñaduras de los brazos de marinero que mencioné antes. Mi instinto arácnido dirigió mis ojos acuosos a las manos, fuertes, sin anillos. Parecía un actor de una película de piratas. Distaba de estar lampiño. A sus ojos rasgados del color de la miel, le acompañaban unas cejas tigreñas y un mentón portentoso con la barba hisper de moda, recortada en punta. Lucía un pelo entrecano, todavía ensortijado. Calculé unos 40 años.
Read morePost más populares
Navega con nosotras, ¡Síguenos!
Te proponemos un viaje alucinante…